Autor:
Morgan Matson.
Editorial:
La Galera
Páginas:
450
Sinopsis:
La
familia de Taylor no es que esté demasiado unida... Pero no es por
falta de afecto, simplemente, están todos muy ocupados. Pero
entonces el padre de Taylor recibe una noticia devastadora, y sus
padres deciden que la familia va a pasar el verano, en la casa de las
montañas a la que solían ir hacer tiempo. Embutidos en una casita
diminuta, la familia empieza a conocerse de nuevo.
Pero,
además, Taylor descubre que personas que creía haber dejado atrás,
siguen ahí. Su antigua mejor amiga está allí, así como su primer
novio... y es mucho más guapo ahora que tiene diecisiete que cuando
tenía doce.
A
medida que pasa el verano y Taylor se da cuenta de que su rival es el
tiempo y que, a pesar que su especialidad es huir de las cosas, está
es una batalla que no podrá eludir. Pero, sin embargo, a veces, hay
tiempo suficiente para las segundas
oportunidades...
tanto con la familia, los amigos y con el amor.
Este
libro no lo iba a comprar, sabia que tenia entre sus paginas una
historia sobre una enfermedad y es algo que, por mas que me gusten
las historias de amor, las enfermedades no las puedo tolerar mucho,
pero no es porque no me gustan, sino que despiertan sentimientos de
tristeza en mi, creo que como en casi cualquier persona, pero a mi me
duelen un poco mas. De cualquier manera, cuando pase por el stand de
Océano en la Feria del Libro no me pude resistir y lo añadí casi
inmediatamente a mi lista de próximas lecturas.
Taylor,
la protagonista de esta historia, es una chica mas del montón, pero
que tiene la particularidad que suele escapar cuando las cosas se
ponen difícil. Tampoco esta muy unida a su familia, pero una noticia
totalmente impensada y devastadora va a hacer que todo se vuelva un
poco mas caótico. A su padre le diagnosticaron una enfermedad y es
por eso que decidieron pasar el verano que se aproxima en la casa del
lago, donde Taylor paso casi todos sus veranos en la infancia.
Allí
se va a reencontrar con personas que decepciono, con personas de las
que huyo, mientras que intenta sobrellevar la enfermedad de su padre
con la mayor entereza posible y pasar un verano que sea memorable no
solo para él, sino también para ella.
Taylor
es un personaje que me gusto mucho, al principio me molesto las cosas
que hacia y esa poca capacidad que tiene ella de quedarse cuando las
cosas se ponen mal. Pero creo que es un personaje que crece un montón
a lo largo de todo el libro, la vamos a ver siendo mas valiente,
reencontrándose con personas a las que dejo atrás porque le dio
miedo las cosas que podían pasar, pero al mismo tiempo, y ahora
cuando diecisiete años, es capaz de llevar adelante acciones que
antes se sentía demasiado cobarde para hacer.
Creo
que este personaje es muy valioso, no solo porque es la protagonista
de la historia, sino también porque ella va a aprender que los
momentos en la vida y las personas que transitan por ella no son
eternos, las personas que hoy están pueden mañana ya no estar.
Me
parece también que esta es una gran enseñanza en la vida ¿No les
parece? Que a pesar de todo lo malo que vaya pasando a nuestro
alrededor podamos afrontar cada día con una sonrisa, que podamos
aprovechar al máximo cada momento que tenemos con las personas que
nos rodean, ademas, me parece que en esta época esto es muy valioso,
ya hay pocas personas que son capaces de levantar la vista del
teléfono para poder apreciar lo que sucede a su alrededor.
El
protagonista masculino de esta historia es Henry, un chico muy dulce
que fue el primer amor de Taylor, un chico que ahora que ella volvió
esta un poco molesto e irritable, pero que en el fondo se derrite
cada vez que la ve cerca.
Hay
muchos personajes que son tremendamente importantes en esta historia,
como el papa de Taylor, que le enseña que cada amanecer es
importante, incluso hay una escena en la que Taylor encuentra a su
padre sentado mirando como amanece sobre el lago y le dice que se
perdió muchísimos amaneceres y después de leer eso me di cuenta
que casi todos los que vivimos en este planeta nos perdemos esos
espectáculos que nos da la vida, que son pocos los que disfrutan la
vida con los aojos abiertos.
En
fin, fue un libro que disfrute muchísimo, que me hizo mal, porque es
un libro que lastima, pero al mismo tiempo me siento afortunada de
haberlo leído, porque es importante saber que hay que disfrutar cada
día lo máximo posible, que hay que disfrutar los momentos que
compartimos con nuestra familia, nuestras parejas, nuestros amigos.
Así
que no quedan mas palabras para recomendar este libro de Morgan
Matson que enamora.
Valoración
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