Hola! Como andan? Se termina el
año! Que rápido que pasa el tiempo no?
Hoy vengo por acá para contarles
lo que este año fue para mí. Estuve buscando una sola palabra que describiera
mi 2015, y me estaba dando por vencida, no se me ocurría nada, hasta que dos
palabras aparecieron, casi mágicamente en mi cabeza.
Descubrimiento y Aprendizaje.
Me puse a reflexionar sobre esas
palabras y la verdad es que están muy bien para describir mi 2015.
Aprendizaje, este año en si fue
un gran aprendizaje. Solemos aprender todo el tiempo, de todo, el ser humano
aprende, de lo que lo rodea, de los demás, de sí mismos.
Este año no solo aprendí a usar
una cámara correctamente, no solo aprendí que combinando diafragma, iso y
velocidad podemos lograr la foto técnicamente perfecta. Aprendí, además, a
mirar, aprendí a sentirme viva cada vez que miraba a través del objetivo de mi
cámara, aprendí a ver diferente. Aprendí a dar significado a una fotografía.
Aprendí que cada vez que abro un
libro estalla, dentro mío, millones de mariposas que anticipan una maravillosa historia.
Aprendí a diferenciar entre un libro bien escrito y un libro bien vendido. Aprendí
a expresarme en las reseñas. Aprendí a escribir una reseña, porque ni bien se
termina un libro, la mente es un lio de ideas, pero reflexionando un poco, se
pueden poner en orden.
Aprendí a no tener miedo, ni
vergüenza. Cuando creé el blog en septiembre del año pasado solo se lo dije a
mi mama, después a mi hermana y por ultimo a mi papa. No tenia vergüenza de
este espacio, nunca me dio vergüenza, pero si tenía miedo, miedo a ser juzgada,
porque entre mis amigos y familia esto no era algo que se viera seguido. El
blog fue creciendo de a poco, finalmente me di cuenta que este espacio es lo
mejor que me paso en la vida, que este espacio, que a su vez es mi rincón donde
me refugio, fue la decisión más fácil y verdadera que tome en mis veintitrés
años. Y un día me di cuenta que decirlo me hacía sentir bien, orgullosa, porque
todo esto lo logrè yo sola. De a poco me fui animando a mostrarlo, y, en
definitiva a mí misma, porque ESTO soy yo, esta es la versión AUTENTICA MIA. De
a poco lo fui contando, primero a una compañera de fotografía, después a un
compañero, después a mis primos y me di cuenta que ninguno me juzgo, solo escucharon,
casi todos me dieron pie a que siguiera hablando.
Este blog no me da vergüenza, me
da orgullo, no me da miedo, me da valentía.
Leí en un libro que el miedo nos
hace más fuerte, y créanme cuando les digo que yo me siento aterrada, pero al
mismo tiempo estoy tranquila, porque el aprendizaje siempre viene acompañado
del miedo y está bien.
En este año también crecí mucho,
si, no en estatura, pienso que me voy a quedar para siempre con mi metro
sesenta y cinco centímetros. Crecí en cuanto a persona y pensando en esta
palabra me di cuenta todo lo que avancé.
Y descubrí. Soy una persona muy tímida, que generalmente escucha más de lo que
habla, este año me sorprendí hablando más de lo que escucho, debatiendo cuando surgía
la ocasión. Si alguien me decía algo que yo consideraba injusto contraatacaba
(nunca lo había hecho, y no se dan una idea de lo gratificante que es). Descubrí
que puedo argumentar, porque tengo las herramientas, descubrí que me puedo
defender con palabras, que no es necesario usar la violencia, porque a veces
las palabras duelen más, por eso hay que saber usarlas con sabiduría, hay que
saber en qué momento usarlas, cuales usar, porque las palabras son armas muy
duras y destructivas.
Descubrí que la fotografía para
mi significa desafío, que ninguna foto es igual a otra (ni siquiera
técnicamente).

Me descubrí a mí misma, pero no
como la persona que antes era, descubrí que algo adentro mío cambió, para bien
o para mal pero cambió.
En fin, solo quería pasar por acá
para contarles lo que este blog significa y haciendo un resumen del año, si
bien también hubieron cosas no tan buenas (que las menos) fue un año
maravilloso.
Espero al 2016 con los brazos
abiertos, dispuesta a hacer de este nuevo año el mejor de mi vida.